Da igual que cambies los muebles de sitio o que traigas nuevas adquisiciones. Has probado también cambiando el color de las paredes ¡y tampoco funciona! Es ese suelo espantoso el que afea toda tu casa, y cuanto más lo miras, más te horroriza. ¿Qué soluciones nos ofrece la obra seca? Los laminados que a estas alturas ya conoce todo el mundo, pero que tienen el pequeño inconveniente de generar bastante polvo cuando se instalan, o los vinílicos que ganan cada día más adeptos por ser tremendamente resistentes, aplicarse sobre los viejos, y no hacer prácticamente nada de polvo al instalarse. Nuestros favoritos son los de click por su rápida instalación (sobre todo los que además ofrecen otras prestaciones como llevar capa aislante, poderse usar en zonas húmedas...), pero también los hay adhesivos. Y si buscas un suelo "para toda la vida" ni te lo pienses: cerámica. Con las baldosas de mínimo grosor o "slim" puedes sobre-alicatar ahorrando costes.
OAM Office Architecture Mallorca.
Fuente: Habitissimo
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